Para algunos estudiantes del Condado Washoe, este año el verano incluye clases adicionales a medida que el distrito intenta abordar la pérdida de aprendizaje y la temida desconexión de la escuela debido a las vacaciones.
El programa de escuela de verano de este año, organizado por el Distrito Escolar del Condado Washoe, se beneficia con recursos del Plan de Rescate Estadounidense, conocido como Fondo de Ayuda de Emergencia para Escuelas Primarias y Secundarias (ESSER). Los distritos de Nevada han recibido cerca de $1 billón de dólares de dicho fondo.
El año pasado el distrito dio a conocer un programa de verano universal usando el dinero federal, y todos los estudiantes podían participar. El programa de este año tiene más duración y está más adaptado a los estudiantes que más lo necesitan.
El distrito ofrece clases de verano para que los alumnos de preparatoria avancen en sus estudios. Los estudiantes de primaria y secundaria se concentran en sus habilidades de lectura, escritura y matemáticas durante cuatro semanas mientras se preparan para el próximo año escolar.
“Están trabajando en habilidades de recuperación para ayudar a construir y mantener el aprendizaje que ya han obtenido, porque mucha pérdida de aprendizaje ocurre en el verano”, dijo Virginia Briggs, facilitadora del sitio para cursos de verano en Mt. Rose K-8 School of Languages en Reno. “Nos queremos asegurar de continuar y mantener esas habilidades, posiblemente incluso agregar habilidades, para que estén más preparados para el próximo grado”.
Treinta y cinco escuelas primarias y secundarias funcionan como centros en todo el condado.
En el sur de Nevada, el Distrito Escolar del Condado Clark ha destinado poco más de las tres cuartas partes de sus fondos ESSER de $777.8 millones a proyectos enfocados en el éxito de los estudiantes, incluyendo $69 millones para programas de aprendizaje de verano, según una presentación del 17 de mayo.
Administradores y maestros enfatizaron la importancia de hacer que la escuela de verano sea divertida y accesible para esos estudiantes.
La maestra de primer grado en Mt. Rose, Veronica Rodriguez, comentó que le gusta tener más libertad para integrar materias como español, ciencias y arte en el plan de estudios de verano, en comparación con el resto del año escolar.
“Realmente me gusta cómo es más flexible en la escuela de verano. Regularmente, tenemos que conectar nuestro arte con cualquier materia que estemos enseñando”, dijo Rodriguez. “Pero en verano, como es una opción libre, puedo incluir mi propio arte basado en lo que a ellos les gusta”.
Todos los estudiantes de verano de Rodriguez obtuvieron grados deficientes. La escuela de verano es una estrategia que usa el distrito para cerrar esa brecha de aprovechamiento.
Beth Martin, supervisora de la zona de escuela de verano en West Reno, explicó cómo los niños se pueden atrasar en sus materias.
“Algunos estudiantes, cuando empiezan la escuela, están un poco atrasados”, dijo. “Entonces, siempre intentas que los niños que van un poco retrasados se pongan al corriente para que, cuando dejen tu grado, estén listos para el próximo grado”.
Si bien el programa busca reducir la pérdida de aprendizaje durante el verano, el personal agregó que el distrito todavía está tratando de abordar tanto la deficiencia académica que hubo debido a la pandemia, como la asistencia irregular de algunos estudiantes.
Este año Rodriguez también está experimentando la escuela de verano en su rol como madre. Su hija de tercer grado está trabajando para mejorar su lectura.
“Ella está con un pequeño grupo de lectores leyendo el mismo libro, y dice que tiene más confianza leyendo porque es un grupo más pequeño”, dijo Rodriguez.
Pero ese avance podría ser pasajero. Es posible que este programa no dure en su estatus actual porque depende de los fondos federales COVID-19.
“Probablemente no lleguen más fondos de ESSER, y luego se van a terminar y se necesitan gastar para septiembre de 2024. Por lo tanto, estamos operando en una crisis de tiempo real porque estos fondos vencen”, dijo Adriana Publico, administradora del proyecto ESSER del distrito. “Queremos gastarlo todo. No queremos devolver nada al gobierno federal. También sabemos que nuestros estudiantes necesitan ayuda ahora”.
Nota de la editora: Jose Davila IV, quien escribió este artículo, es miembro del cuerpo de Report for America, una iniciativa del GroundTruth Project. Esta nota fue publicada por KUNR y su versión original ha sido traducida como parte de la colaboración entre KUNR, The Nevada Independent en Español y Workplace ESL Solutions.