El jueves, 18 de junio, la Corte Suprema de Estados Unidos rechazó el intento del gobierno de Trump para eliminar la política de DACA (por sus siglas en inglés), el programa de acción diferida para quienes entraron al país siendo menores de edad. La decisión nacional impacta a unos 700,000 beneficiarios de DACA que esperaban ansiosamente la noticia.
Samuel Rosales, un beneficiario de DACA y consejero en la escuela secundaria Hug en Reno, nos explicó cómo empezó su día.
“Lo primero que hice fue mirar a mi teléfono”, dijo. “Lo primero que veo son mensajes de mis amigos, diciéndome: ‘Oye, ¿te has enterado de la noticia?’. Me alegró. Estoy feliz. Esto es algo que hemos esperado desde hace mucho tiempo. Han sido tres años de espera”.
DACA se estableció bajo la administración de Obama en el 2012 y otorga a los inmigrantes indocumentados traídos a los EE.UU. en la infancia la oportunidad de obtener un permiso de trabajo renovable de dos años y protección contra la deportación.
Fue suspendida por Trump en el 2017. Desde entonces, no ha quedado claro cómo podría ser el futuro para los que tienen DACA.
Peter Park es otro beneficiario de DACA quien recientemente se graduó de la Universidad de Nevada, Reno y pronto comenzará su residencia en cirugía ortopédica en Las Vegas.
Dijo que la decisión de la Corte Suprema le quitó un peso de encima. Sin embargo, mantiene en cuenta que DACA no es una solución permanente.
“Vivimos nuestras vidas renovando nuestro estatus”, dijo Park. “Incluso en la escuela de medicina, nada se sentía garantizado, ¿sabes? Regularmente tenía reuniones sobre mi proceso de renovación. En este momento es un alivio saber que, al menos, hay tiempo para que el Congreso actúe, para que la gente tenga discursos y hable de las posibles soluciones”.
Y ese diálogo, presentará algunas preguntas importantes. Desde la suspensión del programa en 2017, no se han aceptado nuevas solicitudes de DACA. Ahora con el veredicto de la Corte Suprema, no está claro si eso cambiará. Lo que es más, DACA podría volver a ser cuestionada.
Holly Welborn es abogada y directora de legislación para la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) aquí en Nevada donde actualmente hay cerca de 12,000 beneficiarios de DACA.
“La Corte Suprema encontró que la decisión por la administración Trump de rescindir DACA violaba la Ley de Procedimiento Administrativo, y que debería ser anulada, lo que hace del fallo una especie de tecnicismo”, dijo. “Es posible que el gobierno de Trump venga e intente reivindicar la orden de otra manera, con una justificación diferente, lo que podría hacernos empezar nuevamente desde cero”.
Aunque la resolución del tribunal superior -podría ser temporal, Olga, una beneficiaria de DACA en Reno que nos pidió no usar su apellido, dice que todavía hay motivos para celebrar.
Ella es estudiante de último año en la Universidad de Nevada en Reno, trabaja a tiempo completo para un firma de abogados local y está en camino para graduarse en diciembre.
Si la Corte Suprema hubiera votado a favor de terminar DACA, no sabe lo que hubiera hecho. Ella quiere ingresar en una facultad de derecho y practicar la ley de inmigración.
“Ser la primera en graduarme de mi familia es algo muy importante para nosotros. Estamos todos muy emocionados de poder celebrar en diciembre”, dijo. “Creo que tener esta sensación de alivio realmente me permite celebrar en mayor escala porque puedo ver qué más me espera en el futuro”. Creo que esto realmente me motiva para seguir adelante, continuar con mi educación, y retribuir [a la comunidad] todo lo que pueda”.
Todos estos beneficiarios de DACA dicen que sus esfuerzos continúan, ya que no se garantiza que DACA perdure para siempre. Ahora esperan que el Congreso apruebe una legislación que les proporcione un camino hacia la ciudadanía.
Este reportaje se produjo en colaboración con KUNR Public Radio con contribuciones de la periodista Stephanie Serrano y la pasante Lesly Virgen-Mariscal de KUNR.