La semana pasada el Sistema de Bibliotecas del Condado Washoe se convirtió en uno de los primeros en su tipo en eliminar las multas por libros y materiales atrasados en Nevada, uniéndose a un movimiento nacional dirigido a aliviar el estrés financiero y crear un espacio más acogedor para los usuarios.
La decisión de eliminar las multas atrasadas tuvo lugar durante una reunión de la junta de fideicomisarios de la biblioteca este 19 de agosto y siguió una política de pausar las multas durante la pandemia, así como una resolución que la Asociación Estadounidense de Bibliotecas aprobó en enero de 2019, reconociendo las sanciones como una forma de inequidad social.
Los funcionarios de la biblioteca esperan que la decisión reduzca las barreras para quienes de otro modo podrían tener dificultades para devolver los materiales, como familias de bajos ingresos, personas con discapacidades y ancianos.
“No queremos vigilar a las personas que usan la biblioteca. Queremos que las personas usen la biblioteca, tengan una buena experiencia y regresen por más libros”, dijo a The Nevada Independent Jeff Scott, director de la bibliotecas en Washoe. “No queremos penalizar a las personas por monedas de diez centavos y veinticinco centavos porque la mayoría de las veces eso es”.
Antes del cambio, los usuarios debían 25 centavos por día, incluyendo cuando la biblioteca estaba cerrada, y quien adeudara $10 dólares o más, no podía sacar material adicional.
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La porción de este artículo se ha compartido como parte de nuestra colaboración con The Nevada Independent en Español. Se publicó originalmente en inglés el 27 de agosto y fue escrito por Tabitha Mueller.