Cuando te acercas al río Truckee, te encuentras con una de las muchas y hermosas masas de agua del norte de Nevada. Aunque ahora viene con una preocupación adicional: existe la posibilidad de que esta agua no sea tan segura como nos quieren hacer creer, y puede afectar a los peces que se encuentran en ella.
Peces de agua fresca en Estados Unidos están apareciendo con “sustancias químicas eternas” en sus sistemas que resultan no solo perjudiciales para los propios animales, sino también para los seres humanos que los consumen. Esto supone un problema para las personas que pescan para su sustento, sobre todo las que suelen ser más pobres y no tienen medios para conseguir pescado comprado en tiendas que contengan menos de estos contaminantes.
Las sustancias químicas eternas se definen como contaminantes que permanecerán en los peces durante años. Por su nombre científico, la sustancias polifluoroalquílicas (PFAS) han pasado a estar en la mira de la administración Biden. La Agencia de Protección Medioambiental (EPA) quiere combatir y aliviar este problema provocado por el hombre en todo el país. Los esfuerzos para ello incluyen acciones como la eliminación de las tuberías de plomo de las cañerías que suministran agua potable a los estadounidenses.
Según un reportaje publicado por NPR’s Mountain West Bureau en febrero, los niveles de PFAS son seis veces superiores a la media nacional en Nuevo México, Wyoming, y Colorado, lo que puede ser preocupante para nuestros pescadores locales debido a la proximidad.
Para las personas de Reno que pescan en aguas del condado de Washoe o que viajan a California al lago Frenchman y otros, esto puede ser motivo de preocupación. Una de las masas de agua observadas más cercanas a la zona muy afectada con estos PFAS – según este mapa interactivo proporcionado por el Grupo de Trabajo Medioambiental – es el río Feather, en la región de Sierra Nevada.
Aunque los niveles de PFAS en Nevada parecen más bajos en los estudios, justo durante la última semana de abril, funcionarios del condado de Washoe, la ciudad de Reno, la Autoridad de Agua de Truckee Meadows (TMWA, por sus siglas en inglés) y la División de Protección Medioambiental de Nevada anunciaron que investigarán muestras de agua del lago Swan. La preocupación fue planteada por primera vez por un estudiante de posgrado de la Universidad de Nevada, Reno, que encontró PFAS en grandes cantidades en las muestras que tomó en agosto de 2021.
En su página web, la TMWA afirma que el lago Swan “no es una fuente de agua potable” para esa comunidad y que no se infiltra en las aguas subterráneas locales. Sin embargo, la pesca sigue estando permitida, aunque el condado no lo recomienda.
“… Cualquiera que esté preocupado por la exposición a PFAS debe abstenerse de nadar, pescar u otras actividades en el lago hasta que haya más información disponible”, dijo Bethany Drysdale, portavoz del condado de Washoe. “Por ahora tenemos un único punto de datos para PFAS en el lago Swan, y ese punto de datos es de 2021. No tenemos datos sobre la presencia de PFAS en peces o vida silvestre en el lago.”
También está preocupada por los PFAS Paola Miramontes, estudiante de ciencias medioambientales y becaria McNair de la UNR, que actualmente estudia cómo la urbanización afecta a los arroyos de las ciudades. Investiga activamente el estado dinámico de la calidad del agua en Reno y cómo las toxinas llegan al río Truckee, principalmente a través de los desagües de tormenta, y por qué y cómo llegan al río.
Ella ya tiene ideas sobre cómo la gente puede ayudar a resolver este problema evitable.
“Me gusta mucho abogar por utilizar menos fertilizantes, sales de carretera y limitar la evacuación de aguas. Hay muchos arroyos y riachuelos en toda la zona de Reno que desembocan en el río Truckee y pueden transportar contaminantes nocivos al río”, dijo Miramonte. “Limitando el uso de productos con sustancias químicas dañinas podemos evitar que los contaminantes entren en el agua fresca y afecten a la vida salvaje”.
Por otra parte, el pescado que se vende en el supermercado local suele ser más seguro debido a su forma de cultivo – en granjas con otro mariscos –, que toma lugar en masas de agua más limpias e intermedias, por lo que el riesgo de PFAS es mucho menor. Por ejemplo, Whole Foods Market explica en su sitio web las normas de calidad de sus productos del mar.
Pero si tu no compras tu pescado y en su lugar lo pescas en las masas de agua locales, estos peces son más susceptibles a los PFAS. Incluso la Casa Blanca advirtió que las personas que pescan para su sustento también suelen verse desproporcionadamente afectadas por este problema.
Jim Litchfield es guía local y propietario de Reno Fly Shop, y lleva pescando en la zona desde mediados de los ochenta. Ha observado dos motivos de preocupación en relación con nuestras aguas locales.
“La basura parece ser la condición actual que recibe más comentarios de los clientes y los consumidores”, ha observado Litchfield. ¿Y en cuanto a una solución? “Mitigada con limpiezas del río e impulsadas por la comunidad, una campaña de información pública sobre la eliminación de la micro basura y la basura cotidiana podría ser fantástica. También me gustaría sugerir una campaña similar que eduque al público [sobre] el vertido de líquidos en las alcantarillas pluviales que puede [también] afectar negativamente a la calidad del agua”.
La micro basura puede definirse como algo que puede parecer diminuto cuando se ve en la inmensidad de la naturaleza, pero que sin duda suma con el tiempo. Desde tapones de botella hasta colillas de cigarrillos, los pequeños trozos de basura pueden tener un gran impacto, incluso con su minúsculo nombre.
A pesar de estas preocupaciones, tu puedes estar seguro de que, aunque siempre debes tener en cuenta el agua y reducir la contaminación de nuestras aguas, hay pocos rastros de PFAS en la zona de Reno, según la División de Protección Medioambiental de Nevada (NDEP) y el Departamento de Vida Silvestre de Nevada (NDOW).
“En este momento no se han detectado niveles significativos de PFAS en los peces de Nevada”, dijo Ashley Sánchez, portavoz del NDOW. “Entendemos que hay preocupaciones en torno a los PFAS, pero no hay motivo inmediato de alarma en Nevada”.
Reportaje de Mariya Dawson y Claudia Cruz; traducción de Melissa Bustos